Si te interesa el Reiki y el masaje thai, o estás con el masaje thai y te llama la atención el Reiki, o si simplemente te interesan las terapias naturales, en este artículo comparto mis experiencias con estas dos disciplinas, sus puntos en común y lo que vi poniendo en práctica las dos.
El comienzo
Empecé mis prácticas de reiki varios años antes de descubrir mi vocación por el masaje, me atraía la idea de ser un canal de energía y transmitirla a través de mis manos para sanar a otros. Incluso cuando por esa época mis aspiraciones pasaban por convertirme en traductor de inglés!
Es así que a los 19 años tomé mi primer nivel de reiki. Mi maestra, María Magdalena era un encanto de mujer, y se veía que transmitía no solo una técnica a través de una ceremonia, ella sentía con todo su ser ese poder de sanación que llevamos dormido dentro.
Como siempre fui bastante crítico con todo lo que emprendía, decidí hacer un experimento, y convencí a mis amigos de asistir conmigo a una de las reuniones donde brindábamos sesiones de reiki gratis al público.
Los tres amigos sin excepción sintieron manifestaciones físicas durante el tratamiento (y después también) sin que yo les indicara nada sobre lo que podían esperar, que iban desde un simple hormigueo hasta sensaciones de calor o frío en diferentes partes del cuerpo. Pero siempre acompañadas de un estado de bienestar y relajación.
Eso me animó a seguir practicando y aprendiendo. Nunca llegué a la maestría, pero todavía uso este método para equilibrar mi energía, cuidarme, y limpiar energéticamente los espacios donde trabajo.
El redescubrimiento
Varios años después, ya inmerso completamente en el mundillo del masaje, y especialmente en el masaje tailandés. Noté que volvía a tener sensaciones extrañas en mis manos, aunque no hiciera reiki sino masaje. Así fue que pensé, por qué no combinarlas?
Al fin y al cabo, el masaje thai es considerado una técnica energética según los pilares de la medicina tradicional tailandesa. Y en ambos paradigmas se entiende el origen de la enfermedad como un bloqueo energético, que desaparece al armonizar su flujo en los canales.
Los estiramientos y presiones tienen como función justamente el restablecer el tránsito normal de energía en el cuerpo. Mientras que con la imposición de manos se trata de equilibrar los chackras, o vórtices energéticos que regulan su flujo.
Además, las culturas japonesa y tailandesa han estado emparentadas desde siempre.
Esto fue lo que hice:
- Para empezar, colocaba un símbolo en cada una de mis palmas, para activar el flujo de energía.
- Luego, estando de pie, dibujaba en el aire y apuntando al suelo, otra vez un símbolo, el choku rei.
- A continuación daba un paso sobre él, y dibujaba el símbolo delante de mí, y repetía el procedimiento hacia los cuatro puntos cardinales, para terminar haciéndolo encima de mi cabeza. Como si me metiera en un cubo, con el símbolo en cada punto. Esto es para protección.
- Ya frente al cliente, dibujaba en el aire el mismo símbolo, como cubriendo todo el cuerpo del receptor.
- Después hacía el masaje como de costumbre, y al terminar, volvía a dibujar el símbolo en los pies del cliente, en la coronilla, o en la espalda, según dónde terminara, y me quedaba unos instantes.
Tengo que decir que si bien la mayoría de mis clientes no se percataban de este “ritual”, sí notaban una sensación que no podían explicar del todo bien, y que les agradaba. Y yo me sentía genial al poder compartir esta herramienta y dar un valor agregado a mis clientes.
El consejo
Por eso, si estás haciendo reiki, te animo a que aprendas alguna técnica de masaje, como el masaje tailandés. La práctica de canalización y transmisión de energía hará que tu poder aumente a la hora de hacer masajes.
Y si estás haciendo masaje, creo que el reiki es un fantástico complemento para tu práctica. A mí particularmente me dio una sensibilidad especial en mis manos, que luego me ayudaría muchísimo a la hora de hacer masajes.
Si quieres aprender más sobre el reiki, te recomiendo este libro: “Fuego Reiki”, fue con el que me inicié y tomé como base después de completar los primeros niveles.
Bueno, eso es todo por hoy, espero que este artículo haya sido lo suficientemente ilustrativo para animarte a enriquecer tus habilidades de terapeuta, o iniciarte en ellas. Si te ha gustado, por favor, indícamelo con un “me gusta” y/o un comentario al final de esta página. De esa manera de nutro de tu opinión para poder mejorar el contenido que te entrego cada semana. Muchas gracias!!